Somos vapor que se funde y se condensa
en una gota que resbala por el cuerpo,
y vuelve a ser vapor para continuar su camino
Siempre agua, no otra cosa,
que se eleva ligera y espontánea con las caricias del sol
hasta aquel lugar que habitan los glaciares
Allá arriba, dónde los sueños son reales,
somos dos gotas que se han vuelto nube;
nos abrazamos fuerte esperando ser lluvia
Lo que por agua viene, por agua se va.
ResponderEliminar